20 de mayo de 2019

¡SIEMPRE ESTOY ENOJADO!




¡SIEMPRE ESTOY ENOJADO!






Con esta frase el personaje de ciencia ficción Hulk, le confiesa a Capitán América su secreto de mantener al Doctor Barner siempre en estado consiente y no el fenómeno verde que solo sabe actuar con violencia y quizás sin razonamiento como lo hace este nombrado personaje.

Mark Ruffalo, un afamado actor Norteamericano es quien en realidad encarna al personaje de Hulk, pero detrás de todo esto existe un ser humano quien supo como mantenerse enojado y luchar contra viento y marea, sobre poniéndose a   una terrible enfermedad y negándose a ser vencido por esta. Mark comenzó su carrera de actor  sobre el año mil novecientos noventa y dos y diez años después le diagnosticaron un cáncer cerebral benigno que le produjo una parálisis facial  y esta nueva condición, para un actor significa  tener papeles limitados de actuación, por eso se enojo contra el sistema y comenzó a trabajar su cara y desarrollar ejercicios y estimulación  muscular, recuperó casi el noventa por ciento de ella y gracias a los maquillajes y colocación de las cámaras en forma estratégicas, la falta de movimiento facial es casi imperceptible. Después de esto sobre del dos mil catorce comienza a cosechar triunfos, premios, galardones y reconocimientos por su carrera como actor, productor, director guionista y escritor.

Aunque Mark no es reconocido como una persona cristiana y su fe esta basada en otra creencia, este hombre supo aplicar sobre su vida el siguiente texto bíblico:

“Desde que Juan el Bautista comenzó a predicar hasta ahora, el reino de Dios avanza a pesar de sus enemigos. Solo la gente valiente y decidida logra formar parte de él.”
Mateo 11:12 TLA

Durante unos días he podido hablar acerca de ¿Gozó en medio de la aflicción?, ¡Nada es fácil!, y ¿Dios lo quiere todo?, en ellos he procurado hablar de lo difícil que nos lo pone el sistema en el que vivimos, pues por un lado tenemos al adversario que cumple muy bien sus funciones:

“Cuando el ladrón llega, se dedica a robar, matar y destruir. Yo he venido para que todos ustedes tengan vida, y para que la vivan plenamente.”
Juan 10:10 TLA

Pero, por otra parte todas nuestras decisiones, la falta de compromiso con el cambio, las circunstancias externas nos llevan a vivir un estilo de vida que no es adecuado y por lo tanto no experimentamos la plena bendición de Dios:

“El que escucha lo que yo enseño y hace lo que yo digo, es como una persona precavida que construyó su casa sobre piedra firme. Vino la lluvia, y el agua de los ríos subió mucho, y el viento sopló con fuerza contra la casa. Pero la casa no se cayó, porque estaba construida sobre piedra firme. »Pero el que escucha lo que yo enseño y no hace lo que yo digo es como una persona tonta que construyó su casa sobre la arena. Vino la lluvia, y el agua de los ríos subió mucho, y el viento sopló con fuerza contra la casa. Y la casa se cayó y quedó totalmente destruida”
Mateo 7:24-27 TLA

Y para finalizar debemos de tener en cuenta que Dios permite las pruebas en nosotros para sacar lo mejor de cada cual, por eso nos pasan por el crisol de las aflicciones:

“Pues te he purificado, pero no como a plata; Te he probado en el crisol de la aflicción.”
Isaías 48:10 NBL

Por lo tanto todo  dependerá definitivamente de nuestra actitud frente a la vida lo que hagamos, tenemos que mantener nuestra relación con Dios firme para escuchar su voz, pero una vez él nos habla nosotros tenemos que actuar consecuentemente a sus palabras, pero  tenemos que aprender a dar un paso más y no ser tan débiles ante las circunstancias difíciles a vivir, pues la Victoria la tenemos ya ganada por medio de aquel que derrotó a la muerte y a las tinieblas, a través de quien nos Justificó, quien es nuestro abogado y consolador, nuestro Amado Jesucristo.

Pero, ¿En quién está puesta tú confianza?
¿En quién te soportas en los momentos de aflicción?
¿Arrebatas las promesas dadas por Dios en toda la Biblia?

Yo mantengo enojado, contra el sistema corrupto económico mundial, contra la hambruna y desigualdad social que cada día cuesta más de erradicar. Estoy enojado contra el reino de las tinieblas que posee a aquellos que teniendo la posibilidad de vivir bajo la condición hijos de Dios los mantiene tirados en las calles mendigando, drogados y alcoholizándose. Deseo reventar la falsa apariencia de la sociedad que condenan a una joven embarazada pero ellos asisten a prostíbulos, estoy enfermo y mantengo con un tremendo mal genio contra la religiosidad que amarga, nubla, y pone ciegas a las personas y no pueden ser tan felices como lo es Dios y procurando leer la Biblia le dan su propia interpretación sin importarles el corazón de aquel que la escribió.

Y tú, ¿cuál es la situación que te está aniquilando y no estás haciendo nada?
¿Hasta cuándo vas a estar inmóvil delante de todas las promesas que tienes para arrebatar el reino de los cielos?

Recuerda que la vida que llevas hoy es el fruto de las consecuencias de tus decisiones, para bien o para mal.

¿Estás haciendo realidad las promesas dadas por Dios en tú vida?
¿Estás permitiendo que el Espíritu Santo sea realmente tú guía en medio de las tormentas, problemas y noches de la vida?

En esta enseñanza, hablaré que a pesar de ti y las circunstancias debes arrebatar el reino de los cielos. Sí te gusto este escrito y quieres leerlo completo, entra en la web y lee otros estudios allí publicados, compártelo y suscríbete:


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Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.






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