¡ENTRE LA PROFECÍA Y EL DESTINO!

DÍA 20 

PLENITUD DEL SERVICIO. 

¡ENTRE LA PROFECÍA Y EL DESTINO!

El peor momento, el intermedio.

Durante estos 21 días haremos esta serie de enseñanzas, comprometiéndote voluntariamente a leer la Palabra de Dios, meditar en ella, construir y reconstruir los muros caídos, tomar la una frase de fe y aferrarnos  a ella como clavo ardiente y por último ayunar, para lograr un objetivo común, lograr la extensión del reino de Dios a través de la Plenitud del Servicio. 

Día 20:

“Y tú volverás a escuchar la voz del SEÑOR, y guardarás todos sus mandamientos que yo te ordeno hoy. Entonces el SEÑOR tu Dios te hará prosperar abundantemente en toda la obra de tu mano, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu ganado y en el producto de tu tierra, pues el SEÑOR de nuevo se deleitará en ti para bien, tal como se deleitó en tus padres, si obedeces a la voz del SEÑOR tu Dios, guardando sus mandamientos y sus estatutos que están escritos en este libro de la ley, y si te vuelves al SEÑOR tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma. Este mandamiento que yo te ordeno hoy no es muy difícil para ti, ni está fuera de tu alcance. No está en el cielo, para que digas: «¿Quién subirá por nosotros al cielo para traérnoslo y hacérnoslo oír a fin de que lo guardemos?». Ni está más allá del mar, para que digas: «¿Quién cruzará el mar por nosotros para traérnoslo y para hacérnoslo oír, a fin de que lo guardemos?». Pues la palabra está muy cerca de ti, en tu boca y en tu corazón, para que la guardes.”

Deuteronomio 30:8-14 LBLA

Otro posible título para este devocional sería: “Luchando contra las costumbres”. En este momento de la historia del pueblo de Israel, ellos acaban de recibir la mayor alianza que un pueblo pueda tener, la promesa de tener un Dios sin igual, un Dios que todo lo puede, pues él ha sido el creador de todo.

Dios era conocedor de las vertientes culturales que rodeaban al Israel, costumbres tales como tener dioses para todo, tradiciones de castas sociales y reinados, que supuestamente darían protección y cuidado a todos sus habitantes, entre muchas otras cosas. Y estas, eran muy diferentes al modelo dado por Dios, desde el comienzo o albores  de la humanidad.

Esta alianza se basaba en una relación personal, y cada personaje bíblico así lo demostró. Esta alianza está sostenida en Su gracia, pues si por nosotros fuera, ningún de los héroes de la fe, calificaría.

Esta alianza nos lleva desde la profecía al destino dado por Dios, a través de todas las promesas mesiánicas cumplidas en Jesucristo. Por eso nuevamente mi invitación es de aceptarlo como el dador y cumplidor de ellas y salir a evangelizar para que todo el mundo vea el poder de Dios. 

Reflexionemos:

¿Eres consciente que en ti está escoger tu estilo de vida?

En culturas como la Indoasiática, se considera que si se nace  como mendigo, morirás como tal y tus hijos también mendigos serán. Si alguno de nosotros fuéramos valientes y, predicáramos de esta verdad a ellos, ¿cuántos de ellos, se salvarían y cambiaran su estilo de vida?  

Si escucháramos la voz de Dios para seguir sus mandatos, no estoy haciendo apología a volvernos religiosos, pero si que cumplamos el Gran Mandato o la Gran Comisión, dada por Cristo, salvaríamos muchas vidas, cambiaríamos familia, sociedades enteras, y desde luego todas las promesas de bendición dadas por Dios, se harían realidad en nosotros. Un consejo del cual hago hincapié, no lo hagas por el beneficio, hazlo por la obediencia.

¿Sabes que no es algo imposible de hacer?

En los  versículos anteriormente leídos, nos hablan de la proximidad que tenemos a las bendiciones de Dios. Pero esa misma cercanía, nos dice acerca de hacerlo para con los demás. No se trata definitivamente de hacer más para obtener más. Se trata de cumplir un mandato dado por Jesucristo y que estamos en muchos casos desobedeciendo. 

Para servir por medio de la evangelización no tienes que irte a los lugares más recónditos, basta que salgas a la plaza del barrio y demuestres el amor que Dios ya te dio. No necesitas ir a la África (esto estaría muy bien), te hace falta voltear a mirar al señor senegalés que vende las verduras del barrio y decirle del amor de Jesucristo por él, le llevó a morir en la Cruz, solo para tener una relación intima con él.

Construye y reconstruye: arranca de tu vida toda vergüenza y atadura que no te deja salir a enseñar el evangelio de Cristo

Frase de fe: vivo alineado con el Cielo, por eso soy más que victorioso para traer La Luz de Cristo a mi barrio.

Ayuno: si decides ayunar hoy, pon en tú corazón, la oración y el clamor para que entiendas, el privilegio de vivir ya en tu destino y  así gobernar junto con Cristo, sirviendo, evangelizando, extendiendo el reino de los Cielos.

Comparte este post, permite que otros se beneficien de la bendición de leerlo, quizás están buscando el Camino y esta sea la forma de encontrarlo a él. Pues #hechos29laobrainconclusa es una realidad.

En esta enseñanza,  hablaré acerca  de mi identidad como hijo de Dios. Sí quieres otros artículos completos, entra en la web y lee los estudios allí publicados, compártelo y suscríbete:

DÍA 20. PLENITUD DEL SERVICIO.

¡UN LUGAR PRIVILEGIADO!

www.agopla.com 

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Tel + 44 7446 424456 WhatsApp

Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti

DÍA 20 

PLENITUD DEL SERVICIO. 

¡ENTRE LA PROFECÍA Y EL DESTINO!

Sabiendo exactamente donde estoy, así mismo puedo avanzar.

Durante estos 21 días haremos esta serie de enseñanzas, comprometiéndote voluntariamente a leer la Palabra de Dios, meditar en ella, construir y reconstruir los muros caídos, tomar la una frase de fe y aferrarnos  a ella como clavo ardiente y por último ayunar, para lograr un objetivo común, lograr la extensión del reino de Dios a través de la Plenitud del Servicio. 

Día 20:

“Y tú volverás a escuchar la voz del SEÑOR, y guardarás todos sus mandamientos que yo te ordeno hoy. Entonces el SEÑOR tu Dios te hará prosperar abundantemente en toda la obra de tu mano, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu ganado y en el producto de tu tierra, pues el SEÑOR de nuevo se deleitará en ti para bien, tal como se deleitó en tus padres, si obedeces a la voz del SEÑOR tu Dios, guardando sus mandamientos y sus estatutos que están escritos en este libro de la ley, y si te vuelves al SEÑOR tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma. Este mandamiento que yo te ordeno hoy no es muy difícil para ti, ni está fuera de tu alcance. No está en el cielo, para que digas: «¿Quién subirá por nosotros al cielo para traérnoslo y hacérnoslo oír a fin de que lo guardemos?». Ni está más allá del mar, para que digas: «¿Quién cruzará el mar por nosotros para traérnoslo y para hacérnoslo oír, a fin de que lo guardemos?». Pues la palabra está muy cerca de ti, en tu boca y en tu corazón, para que la guardes.”

Deuteronomio 30:8-14 LBLA

Otro posible título para este devocional sería: “Luchando contra las costumbres”. En este momento de la historia del pueblo de Israel, ellos acaban de recibir la mayor alianza que un pueblo pueda tener, la promesa de tener un Dios sin igual, un Dios que todo lo puede, pues él ha sido el creador de todo.

Dios era conocedor de las vertientes culturales que rodeaban al Israel, costumbres tales como tener dioses para todo, tradiciones de castas sociales y reinados, que supuestamente darían protección y cuidado a todos sus habitantes, entre muchas otras cosas. Y estas, eran muy diferentes al modelo dado por Dios, desde el comienzo o albores  de la humanidad.

Esta alianza se basaba en una relación personal, y cada personaje bíblico así lo demostró. Esta alianza está sostenida en Su gracia, pues si por nosotros fuera, ningún de los héroes de la fe, calificaría.

Esta alianza nos lleva desde la profecía al destino dado por Dios, a través de todas las promesas mesiánicas cumplidas en Jesucristo. Por eso nuevamente mi invitación es de aceptarlo como el dador y cumplidor de ellas y salir a evangelizar para que todo el mundo vea el poder de Dios. 

Reflexionemos:

¿Eres consciente que en ti está escoger tu estilo de vida?

En cultural como la Indoasiática, se considera que si se nace  como mendigo, morirás como tal y tus hijos también mendigos serán. Si alguno de nosotros fuéramos valientes y, predicáramos de esta verdad a ellos, ¿cuántos de ellos, se salvarían y cambiaran su estilo de vida?  

Si escucháramos la voz de Dios para seguir sus mandatos, no estoy haciendo apología a volvernos religiosos, pero si que cumplamos el Gran Mandato o la Gran Comisión, dada por Cristo, salvaríamos muchas vidas, cambiaríamos familia, sociedades enteras, y desde luego todas las promesas de bendición dadas por Dios, se harían realidad en nosotros. Un consejo del cual hago hincapié, no lo hagas por el beneficio, hazlo por la obediencia.

¿Sabes que no es algo imposible de hacer?

En los  versículos anteriormente leídos, nos hablan de la proximidad que tenemos a las bendiciones de Dios. Pero esa misma cercanía, nos dice acerca de hacerlo para con los demás. No se trata definitivamente de hacer más para obtener más. Se trata de cumplir un mandato dado por Jesucristo y que estamos en muchos casos desobedeciendo. 

Para servir por medio de la evangelización no tienes que irte a los lugares más recónditos, basta que salgas a la plaza del barrio y demuestres el amor que Dios ya te dio. No necesitas ir a la África (esto estaría muy bien), te hace falta voltear a mirar al señor senegalés que vende las verduras del barrio y decirle del amor de Jesucristo por él, le llevó a morir en la Cruz, solo para tener una relación intima con él.

Construye y reconstruye: arranca de tu vida toda vergüenza y atadura que no te deja salir a enseñar el evangelio de Cristo

Frase de fe: vivo alineado con el Cielo, por eso soy más que victorioso para traer La Luz de Cristo a mi barrio.

Ayuno: si decides ayunar hoy, pon en tú corazón, la oración y el clamor para que entiendas, el privilegio de vivir ya en tu destino y  así gobernar junto con Cristo, sirviendo, evangelizando, extendiendo el reino de los Cielos.

Comparte este post, permite que otros se beneficien de la bendición de leerlo, quizás están buscando el Camino y esta sea la forma de encontrarlo a él. Pues #hechos29laobrainconclusa es una realidad.

En esta enseñanza,  hablaré acerca  de mi identidad como hijo de Dios. Sí quieres otros artículos completos, entra en la web y lee los estudios allí publicados, compártelo y suscríbete:

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