Devocionales de Alfonso Gomez Plaza: ESCUCHAR OTRAS VOCES, ME DISTRAEN DE LA MISIÓN.

ESCUCHAR OTRAS VOCES, ME DISTRAEN DE LA MISIÓN.

Aprender a diferenciar las buenas voces, nos llevará toda la vida

DIOS en su inmensa sabiduría sabe donde nos tiene que ubicar y poner. Por ejemplo, yo no soy una estrella del rock porque estaría haciendo el ridículo cuando existen personas con dones y capacidades extraordinarias para hacerlo. Por eso, debemos arraigarnos en aquello que Dios nos mando a hacer.

“Que nos os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar”.

2 Tesalonicenses 2:2:A RV60

“No seáis niños en el modo de pensar, sino maduros”.

1 Corintios 14:20:B RV60

Una buena oportunidad para demostrar la madurez, es reconocer en qué estamos fallando y corregirlas, por lo menos hacer todo lo posible por no desviarnos del propósito, sueño y destino divino que tenemos. En el pasaje de Jueces 9.8,15 encontramos una preciosa parábola, donde algunos buenos árboles frutales, esenciales para nosotros, tuvieron que escuchar voces y no eran malas ni desagradables las sugerencias que recibían, eran para ser coronados como reyes, pero los árboles, en ningún momento permitieron que esas voces les distrajeran del trabajo y la posibilidad de seguir dando frutos para Dios y para los hombres.

“Dijeron entonces todos los árboles a la zarza: Anda tú, reina sobre nosotros. Y la zarza respondió a los árboles: Si en verdad me elegís por rey sobre vosotros, venid, abrigaos bajo de mi sombra; y si no, salga fuego de la zarza y devore a los cedros del Líbano”.

Jueces 9.15 RV60

Lamentablemente siempre habrá quien si escuche las voces que procuran distraernos y, cuando lo hacen no es para nada bueno. Desearía dejarte unas notas más para reflexionar: sabes que cedro del Líbano está relacionado con la eternidad y con todo lo sagrado y, la zarza lo primero qué hace es poner en ridículo la majestuosidad de dicho árbol.

La palabra ridículo proviene del latín ridiculum que significa : algo que provoca risa o burla por resultar muy extraño, grotesco, extravagante, etc… que es escaso, pequeño o menor de lo que podría o debería ser.

¿Qué está tratando de decirte Dios en estos momentos?

¿Qué está trabajando Dios contigo?

ESCUCHAR OTRAS VOCES, ME DISTRAEN DE LA MISIÓN.