DEVOCIONAL CRISTIANO

PALO SECO

He aquí, he puesto mis palabras en tu boca.

NO tengo dinero. Soy muy joven y quiero vivirlo. Estoy trabajando, en mi tiempo de vacaciones lo haré. No se hablar Ingles. No conozco a nadie en esa organización que me abra la puerta necesaria. No tengo estudios universitarios que me respalden en esta empresa…en fin, la lista de excusas son muchas y muy variables, tal como lo dije en estos días, estás no son falsas, pero tampoco dejan de ser el motivo que encontramos para negarlo y hacerlo; no podemos seguirle sacando el cuerpo a Dios y desde luego a la imperiosa necesidad de extender el reino de Cristo, a la familia, al barrio, a la ciudad y como dijo Jesucristo: “hasta lo último de la tierra”.

Lo más curiosos es, que somos nosotros los que nos ponemos esos limites, pero Dios, en ningún momento nos dice lo que tenemos que hacer o tener, solo anhela nuestra disposición y que lo hagamos, sin anteponer nuestras limitaciones.

“La palabra de Jehová vino a mí, diciendo: ¿Qué ves tú, Jeremías? Y dije: Veo una vara de almendro”

Jeremías 1. 11RV60

Moisés y Jeremías tuvieron en común que, a partir de un palo seco, Dios demostró lo poderoso que es él, pues Dios, no necesita de mega estadios y super ministerios para llevar su palabra a la snaciones; en todo caso, Dios está buscando un corazón dispuesto a servirle y obedecerle, pues estos seres humanos, han entendido que lo importante es: “morir todos los días a uno mismo, tomando la cruz y así seguimos a Cristo”.

“Porque he aquí que yo te he puesto en este día como ciudad fortificada, como columna de hierro, y como muro de bronce contra toda esta tierra, contra los reyes de Judá, sus príncipes, sus sacerdotes, y el pueblo de la tierra. Y pelearán contra ti, pero no te vencerán; porque yo estoy contigo, dice Jehová, para librarte”

Jeremías 1. 18,19 RV60

Con un palo seco, podemos abrir mares y conquistar ciudades. Con una simple vara, podemos derrotar ejércitos, derrocar gobiernos y llevar el Evangelio de Cristo. ¿Cuál será la excusa que nos limitará? No necesitamos tener miles de seguidores en YouTube, con que la persona indicada por Dios y esta miré nuestro vídeo es suficiente. Ni en Instagram o Facebook tenemos que tener millares de seguidores, solo con que dispongamos todo nuestro esfuerzo por demostrar a Cristo, es suficiente, Dios dará el crecimiento, dejemos de estar mirando lo poco y miremos lo mucho que tenemos con una hermosa vara de almendro en nuestras mano.

PALO SECO

Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti. Recuerda adquirir el libro: “Cómo entender que el sacerdocio produce en mí, hombría”, a través de este enlace:

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