DIOS NO ME HABLA
¿Puede alguno destrozar el hierro, o el bronce?
SON muchos los que hoy por hoy dicen: “Dios no me
habla o por lo menos yo no lo escucho”. Esto lamentablemente es una realidad,
pero no es la Verdad y el estilo de vida que Dios quiere que tengamos. Dice la Biblia
que Dios nos canta de noche y de día nos habla acerca de sus misericordias, por
lo tanto, Dios siempre nos habla. Sin embargo, cuando leemos la palabra,
encontramos que Dios se ha propuesto no hablar paradójicamente con ciertas
personas, ya que la intervención de estos delante Dios, modifican Sus planes:
“Entonces el SEÑOR me dijo: Aunque Moisés y Samuel se presentaran ante mí,
mi corazón no estaría con este pueblo; échalos de mi presencia, y que se vayan”
Jeremías 15. 1 LBLA
Moisés clamó ante Dios y fue tal el compromiso emitido que el juicio divino
se detuvo. El pueblo de Dios, tan solo un par de días después de hacer promesas
faltaron a ella y Dios deseaba romper este pacto también y aniquilar a estos, pero
el oportuno clamor de Moisés evitó un desastre mayor, lo puedes leer completo en Éxodo 32.
Samuel, también cuando el pueblo de Israel cambió la gloria eterna de Dios,
reclamando un rey para ellos como los pueblos de alrededor, intercedió por ellos
para no perecer y así Dios no hizo nada en contra de ellos, esta historia está
completa en 1 de Samuel 12.
“Y pondré sobre ellos cuatro géneros de males --declara el SEÑOR--: la
espada para matar, los perros para despedazar, y las aves del cielo y las
bestias de la tierra para devorar y destruir”
Jeremías 15. 3 LBLA
Actualmente nos encontramos en medio de una pandemia, desastres en Beirut y
Rusia, desplazados por las guerras en muchos países y en diferentes continentes;
no podemos asegurar que fue Dios quien envió estas tragedias, pero si podemos
decir que él las permite, tal como lo dice el texto anterior. Entonces, ¿por qué
no somos como Moisés y Samuel clamando? ¿Por qué nuestra oración no es
escuchada por Dios? ¿Por qué no escuchamos la voz de Dios?
Estas preguntas reflexivas, deberían provocar en nosotros un cambio de
mentalidad, pasando de tener una mente natural y actuar con la Mente de Cristo,
quizá de está manera, logremos que Dios nos incluya al selecto grupo de personas,
con las que él no quiere hablar.
DIOS NO ME HABLA
Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de
Cristo que ya está en ti. Recuerda adquirir el
libro: “Cómo entender que el sacerdocio produce en mí, hombría”, a través de
este enlace:
Si quieres que estemos orando por ti, mándanos por medio de
las redes sociales o a través de estos contactos,
tu petición.
email: agopla1976@gmail.com
Podcats: https://anchor.fm/alfonso-gomez-plaza
Instagram: @agopla1976
Twitter: @PonchoGP1
Facebook: fb.me/devocionalesponcho
WhatsApp: Tel + 44 7446
424456
Sky: live633268005c
Pinterest: agomezplaza
YouTube: https://www.youtube.com/channel/UCBNslYjN5a7vRk2z7w3Qqnw/featured?view_as=subscriber
Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de
Cristo que ya está en ti.
Amén! Excelente Palabra. Bendito sea Dios por regalarnos un día más de vida, a él sea la Gloria y Honra!!!
ResponderEliminarHola Neria.
ResponderEliminarDios te bendiga siempre. Gracias por tu comentario y espero que aumente tu sabiduría día tras día