SIRVIENDO AL CONTRINCANTE
Quedaros allí hasta
que yo os visite.
EN algún momento de la
vida, nos hemos encontrado con la frase: “durmiendo con el enemigo”. Este refrán
hace referencia a la necesidad de servir o trabajar con alguien que no nos
llevamos bien o directamente estamos enfrentados a él. Esto puede ocurrir en
cualquier ámbito, ya sea en lo laboral, familiar o de cualquier índole, lo cual
nos lleva, a estar en un estado permanente de alerta, para prevenir cualquier acción
de este, la cual nos pueda perjudicar o hacer daño.
Dios, en su infinita
gracia, amor y misericordia, está constantemente advirtiéndonos acerca de vivir
una relación íntima y personal con él, pues así será una manera de estar
protegido contra las acechanzas del adversario. Dios sabe que, cada vez que nos
alejamos de él, la presencia del adversario será más intensa sobre nosotros y
así mismo, abriremos puertas que nunca se debieron abrir.
“Y ahora yo he puesto
todas estas tierras en mano de Nabucodonosor rey de Babilonia, mi siervo, y aun
las bestias del campo le he dado para que le sirvan”
Jeremías 27. 6 RV60
El pueblo de Israel
tuvo muchos conflictos y adversarios en su historia, ahora, después que Dios por
activa y por pasiva, les dijera que cambiasen, estarían en manos de uno de los
mayores enemigos del pueblo, tanto como siglos anteriores, ellos mismos
estuvieron en manos de Egipto. Lo más curioso de todas dos situaciones, Dios
pone al pueblo de Israel a servir al contrincante, pero a su vez, pone a este
para que defienda y haga progresar al pueblo de Dios a través del servicio y de
los beneficios obtenidos por este servir al pueblo dominante.
“No los oigáis;
servid al rey de Babilonia y vivid; ¿por qué ha de ser desolada esta ciudad?”
Jeremías 27.17 RV60
Igual que el aquel
momento, muchos serán los que digan y aconsejen erróneamente, diciendo que no hagamos
caso a esos consejos, quizá suceda todo lo contrario, darán malas directrices,
haciendo caer al pueblo. La clave de todo esto es una vez más: tener una intima
y perfecta comunión con el Padre celestial, para que nos guie a hacer lo
correcto y movernos conforme a su Santa y perfecta voluntad.
No nos aterremos si Dios
nos cambia de país para darnos prosperidad, pero antes pasamos muchas penurias.
No nos desesperemos si para llegar a la meta final, somos tirados a un pozo
seco como lo vivió José. No nos extrañemos de servir al rey de Babilonia, pues
quizá, Dios nos envía allí para tratar con nuestro carácter.
SIRVIENDO AL
CONTRINCANTE
Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de
Cristo que ya está en ti. Recuerda adquirir el
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Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de
Cristo que ya está en ti.
Gracias por cada Palabra que recibimos.... Dios continúe bendiciendoles.
ResponderEliminarLes amamos en CRISTO.
Un fuerte abrazo desde CUBA.
Dios bendiga a Cuba!!! Y anhelamos que puedan vivir en gozo el Evangelio de Cristo resucitado entre vosotros. Un abrazo y mil bendiciones por vuestras palabra... son alegría para mi ser y bendiciones de parte de nuestro Padre Celestial
ResponderEliminarGracias por tu aportación diaria al conocimiento del evangelio
ResponderEliminarHola Carlos.
ResponderEliminarEste Don es un regalo divino y trato de hacerlo de esta manera.
Un abrazo y bendiciones
Gloria a Dios 🙌 ☝️ 🌿
ResponderEliminarAsí sea siempre, Carlos
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