UN GRAN GOZO
La Biblia no es simplemente un libro para leer,
hay que meditar lo que en él está escrito.
UNA de las pruebas más difíciles para mí, es no
poder ayunar. Debo tomar una medicación que baja mis niveles de azúcar en
sangre causando Hipoglucemia a causa de la Hiperglucemia que tengo. A consecuencia
de ello, debo comer cada dos horas y así mantener mis limites de azúcar, más o
menos regulados. Uno de los rituales más enriquecedores en el cristianismo es
el ayuno, pues nos enseña a controlar nuestro cuerpo, dando así ocasión a estar
dispuestos a recibir Palabra revelativa por parte de nuestro Padre Celestial.
No veamos el ayuno como un motivo de lamento o
tristeza, en todo caso, siempre podremos estar gozosos, pues el Novio,
Jesucristo, ya esta dispuesto para recibir a la Novia, la Iglesia y así las bodas
del Cordero se celebrarán en una unión celestial y eterna.
“Y los discípulos de Juan y los de los fariseos ayunaban; y vinieron, y le
dijeron: ¿Por qué los discípulos de Juan y los de los fariseos ayunan, y tus
discípulos no ayunan?”
Marcos 2. 18 RV60
¿Por qué no ayuno? Porque no puedo. Hasta en
tres ocasiones, en estos treinta años de vida cristiana, he ayunado por largos
periodos, y sinceramente, he salido renovado. Ahora, tan solo lo hago en días
sueltos, desde la media noche hasta las tres de la tarde, solo consumo café,
galletas de arroz y agua.
Otro motivo por el que no ayuno, es por el inmenso
gozo que hay dentro de mi corazón. Jesucristo me guía y no mis emociones,
aunque soy impulsivo por naturaleza, pero hoy no ayuno por emociones, sino que
lo hago a consciencia, pues he entendido que hay una Palabra revelada que aun
no he asimilado, por lo tanto, necesito meditar y reflexionar con Biblia en
mano y ver lo que realmente el Espíritu Santo, me está hablando.
“Jesús les dijo: ¿Acaso pueden los que están de bodas ayunar mientras está
con ellos el esposo? Entre tanto que tienen consigo al esposo, no pueden ayunar”
Marcos 2.19 RV60
Vivir el gozo del Señor y de la salvación es
literalmente, un estilo de vida. Nuestras caras han de reflejar lo que nuestras
palabras dicen, nuestros cuerpos han de demostrar los pensamientos que tenemos.
El mundo ha de vislumbrar que Cristo vive en nosotros, de tal manera como lo vivieron
los apóstoles de Jesucristo, después de su resurrección.
UN GRAN GOZO
Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.
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revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.
Gracias Alfonso. Debo confesar que no ayuno, aunque mi físico no se resentiría aunque ayude...gracias meditaré en lo escrito
ResponderEliminarGracias José por estar pendiente y leer este texto...Bendiciones
EliminarMuy buena la reflexión sobre el ayuno!!!
ResponderEliminarBendiciones.
Dios te bendiga y te de sabiduría
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