Devocionales de Alfonso Gomez Plaza: DEVOCIONAL CRISTIANO

EL CARÁCTER HABLA

Poncho, el que abriga, el que abraza.

AL tratar con las personas, solemos ponerles otro nombre dependiendo de alguna anécdota o de su manera de ser, evidentemente conforme al carácter de cada cual. En mi caso, siempre me han dicho por sobrenombre “poncho” que significa o da entender: el que abriga, abraza o protege, tal como el poncho lo haría cuando nos lo ponemos para cubrirnos del frio o de la lluvia como en los países anglosajones. Cuando Dios nos hace el llamamiento, conoce perfectamente que píe nos cojea entre comillas, porque a Dios nada le sorprende, porque él esta buscando almas heridas que sanen otras almas heridas.

“A Simón, a quien puso por sobrenombre Pedro; a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan hermano de Jacobo, a quienes apellidó Boanerges, esto es, Hijos del trueno”

Marcos 3. 16-17 RV60

Pedro el autor intelectual del Evangelio de Marcos, le debió haber parecido muy divertido recalcar esa faceta de Cristo de cambiar los nombres a las personas, ponerles apodos, lo cual es muy común en todos los tiempos. El poner apodos, en este caso, no tiene que ver con una acción despectiva, todo lo contrario, lo hacían por la cercanía y amistad, por lo tanto, era parte del seudo bautismo de la relación entre los protagonistas: a Simón le llamó Pedro, no por quien era en aquel momento, sino por el carácter que demostró después de muchas pruebas, por otra parte a Juan y Jacobo, Juan el apóstol del amor junto con su hermano, desearon mandar a quemar a un pueblo por no escuchar las Buenas Nuevas y desearon provocar una nueva Sodoma y Gomorra con fuego y rayos para enjuiciarlos.

“A Andrés, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Jacobo hijo de Alfeo, Tadeo, Simón el cananista, y Judas Iscariote, el que le entregó. Y vinieron a casa”

Marcos 3. 18-19 RV60

El fanático, el celoso, el traidor, el recaudador, el hablador, el figura, el máquina, la trabajadora, la luchadora, la impaciente, la obsesiva, la peleadora, la doctora, el ordenado, la rusa, la militar, el siempre listo…jajaja, como me gusta descubrir esta faceta de Jesucristo. Lo mejor de esta enseñanza, todos, absolutamente todos, a pesar de nuestro buen o mal carácter, estaremos con Cristo compartiendo en Su casa, comiendo juntos en la Mesa del Dios vivo. Si hoy, no conoces a Cristo, tienes la oportunidad de ser llamados por él, solamente tenemos que hacer una breve oración entregando nuestra vida a él y aceptando que él nos diga: “sígueme” …

EL CARÁCTER HABLA

Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.