Devocionales de Alfonso Gomez Plaza: DEVOCIONAL CRISTIANO- EN MEDIO DE OTROS

DEVOCIONAL CRISTIANO

EN MEDIO DE OTROS

Desear ser cristiano y vivir en un convento es, una incongruencia.

LA gran mayoría de cristianos fallamos en la evangelización por nuestra falta de testimonio, porque somos como ezquizofrenicos, es decir, decimos que amamos a Dios pero llegamos a albergar y sentir odio por un ser supuestamente querido, es tal el grado de incongruencia entre lo que creemos y hacemos que las grandes dictaduras de inicio del siglo anterior, se hicieron en el nombre de dios… lo dejo en minúscula porque no es justo con Dios. Cuando estamos en un encuentro constante con Jesucristo, vivir una plena relación con el, sabemos identificar diferentes acciones que vendrán para proteger y sustentar la vida de otras personas como de las nuestras, pues, nada de lo que hacemos, esta fuera del control nuestro y hacen parte de nuestro aprendizaje.

«Aquel día, cuando llegó la noche, les dijo: Pasemos al otro lado»

Marcos 4.35 RV60

Cuando tenemos la oportunidad de leer « noche » en la Biblia, podríamos considerarlo como una advertencia a un problema o una situación difícil. Jesucristo estaba velando por él y por los suyos, él estaba previniendo algo que acontecería, por eso, sabia de la necesidad de influir con aliento, esperanza y fe a cada uno de los suyos, los discípulos. De igual manera, hoy Dios no nos ha abandonado, y aunque no desea vernos sufrir, por soberanía divina, permite los momentos difíciles para que aumente nuestra fe y dependencia a él.

«Y despidiendo a la multitud, le tomaron como estaba, en la barca; y había también con él otras barcas»

Marcos 4.36 RV60

Una vez que estamos advertidos, no hay tiempo para las pequeñeces, en todo caso para las acciones y avanzar. Alrededor de los discípulos y de Cristo había otras barcas, quizá, esa no era la de Jesucristo, pero ya era el momento de partir, era el momento de avanzar y llegar a otros lugares para ayudar, edificar, sanar, demostrar el amor de Dios.

De igual manera, nos corresponde a nosotros saber actuar en el mismísimo momento y saber que hacer, siempre guiados por el Espíritu Santo, pues solo él sabe el porvenir y los aconteceres, de este modo, nos guiara, consolara y protegerá. No pretendamos hacer nuestra voluntad, sin consultar a Dios y al final de cuentas, esperar que el nos rescate, acciones como estas, solo conducen a ser insolentes delante de la presencia de Dios. Seamos pues, humildes y aprendamos a escuchar al Espíritu de Dios como guía y ayuda.

Dios te bendiga.

EN MEDIO DE OTROS

Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.