Devocionales de Alfonso Gomez Plaza: DEVOCIONAL CRISTIANO

EN TU TIERRA

Nadie es profeta sino en su propia tierra.

COMO algunos ya saben, soy de origen colombiano, pero dentro de mi corazón hay un amor especial por Europa, sobre todo por España. No puedo negarlo, anhelo el día que se levanten las restricciones de viaje y poder ir por las naciones predicando el Evangelio de Cristo, allí donde me inviten. Pero sé, que tengo dos serias dificultades para hacerlo, justamente en Colombia y en España, ¿por qué? Y la respuesta es sencilla, es por el testimonio y por el nivel de exigencia de predicación que cada día se nos pide.

“Salió Jesús de allí y vino a su tierra, y le seguían sus discípulos”

Marcos 6. 1 RV60

Sí Cristo lo vivió, ¿por qué nosotros no lo vamos a vivir? El Evangelio de Cristo y la fe son acciones que se viven constantemente, no hay tiempo entre una y otra, no existe una tregua, vamos de desierto en desierto, de prueba en prueba. Hoy no necesitamos hacer el mismo sacrificio que hizo Cristo, pero tenemos que morir diariamente a nosotros mismos y permitir que resucitemos con la Mente de Cristo y actuar conforme a esta nueva identidad. En Colombia, deje buenos testimonios y malos también, lo mismo que en España, y cuando comenzamos a dar enseñanzas del amor de Dios, los primeros en asomar la cabeza serán justamente aquellos que tienen para reclamarnos por nuestros malos ejemplos.

“Y llegado el día de reposo, comenzó a enseñar en la sinagoga; y muchos, oyéndole, se admiraban, y decían: ¿De dónde tiene éste estas cosas? ¿Y qué sabiduría es esta que le es dada, y estos milagros que por sus manos son hechos?
¿No es éste el carpintero, hijo de María, hermano de Jacobo, de José, de Judas y de Simón? ¿No están también aquí con nosotros sus hermanas? Y se escandalizaban de él”

Marcos 6. 2-3 RV60

Así que, llegará el día que tendremos que enfrentar nuestros temores y malos estilos de vida y decirle a los de nuestra tierra: Cristo me salvó y ahora este mensaje es para ti. Si, no podemos huir de nuestro pasado y realidad, pero en Cristo somos nuevas creaturas, sabiendo que nuestra pasada manera de vivir ya fue justificada en la Cruz del Calvario por nuestro salvador Jesucristo. La segunda parte, la exigencia en nuestra predicación, la comentaré el día de mañana.

Dios te bendiga.

EN TU TIERRA

Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.