Devocionales de Alfonso Gomez Plaza: DEVOCIONAL CRISTIANO

NO PIERDAS LA VIDA

Somos responsables de nuestras decisiones pero nuestro silencio respalda las acciones de otros.

ES sorprendentemente lo influenciables que somos a lo largo de nuestras vidas. Muchas de esas ideas, consejos y opiniones que nos aportan los demás son buenas para nuestros estilos de vidas. Sin embargo, en otras ocasiones nos encontraremos que esos conceptos que nos dan, no son para nada buenos para nuestras vidas, empujándonos a llevar un estilo de vida que no tiene que ver con la voluntad de Dios. Por lo tanto, esas personas que deberían ser de bendición para nosotros, se convierten en personas toxicas. No tenemos por qué perder la vida por seguir consejos malos disfrazados de elocuencia y pseudo santidad, tenemos que mantenernos firmes en los conceptos y preceptos divinos. Debemos mantener una firme relación con el Espíritu Santo de Dios y así, sabremos lo que está bien y lo que es bueno para cada uno de nosotros.

“Y si tu pie te fuere ocasión de caer, córtalo; mejor te es entrar a la vida cojo, que teniendo dos pies ser echado en el infierno, al fuego que no puede ser apagado.”

Marcos 9. 45 RV60

En esta metáfora, Cristo nos invita a tener un caminar recto delante de los ojos de Dios. Muchas veces esa senda será influenciada por la misma cultura y dependerá de nosotros aceptarlo o no. Por ejemplo, como colombiano, es fácil llevar una vida de conmiseración y un estilo de vida tipo novelesco. A consecuencia de ello, tuve que renunciar a ese tipo de estilo vida y encausarme nuevamente con una mentalidad como la que se tiene en el reino de los cielos.

“Donde el gusano de ellos no muere, y el fuego nunca se apaga.”

Marcos 9. 46 RV60

El Inferno real o metafórico no es un lugar donde se desea pasar la eternidad. Ningún ser humano en su sano juicio desea estar eternamente en el infierno. Tener que dejar una amistad o relación toxica no es para nada fácil. Son muchos los sentimientos que debemos afrontar, pero sinceramente, es lo mejor que podemos hacer en nuestras vidas. Jesucristo fue rechazado por un joven casi perfecto para el reino de los cielos, pero el amor que este manifestaba por el dinero no le permitió seguir a Cristo. Jesucristo acepta esta decisión y lo deja marchar. De igual manera deberíamos tomar este ejemplo para aprender a desprendernos de todos aquellos que son un tropiezo para nuestras vidas, pues es mejor ser cojo, que perder la vida misma.

Dios te bendiga.

NO PIERDAS LA VIDA

Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.

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