Devocionales de Alfonso Gomez Plaza: DEVOCIONAL CRISTIANO- UNA COMPARATIVA

UNA COMPARATIVA

Tratar de razonar la fe es imposible simplemente se cree o no.

NO conozco aun al primer ser humano que le gusta que lo comparen con otro. Es más, la mayorías de las ofensas que causan heridas en nosotros suenen provenir de esas comparaciones, sobre todo, cuando nos las hicieron cuando éramos niños o jovencitos. Es muy paradójico esto al ver como Jesucristo para apelar a nuestra inocencia lo que hace es compararnos con infantes. Aquí es importante dar el punto de vista adecuado, no digo el correcto ni el preciso, a este tipo de enseñanzas bíblicas para tratar de sacar la mayor cantidad de jugo a este. Al fin y al cabo, pretendemos tener la Mente de Cristo, pero lo que pensó Jesús de Nazareth exactamente, no lo sabemos.

“De cierto os digo, que el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él.”

Marcos 10. 15 RV60

Caminar por fe es un proceso que nos llevara a tomar las promesas de Dios como estilo de vida y esperar que Dios actúe conforme a sus promesas. Otra cosa es, el hecho que no nos guste el actuar de Dios o lo que Dios nos da, no se acerque a las expectativas que nos hemos creamos. Recordemos que Dios tiene mayores y mejores planes que los que podemos tener nosotros sobre nosotros mismos. He visto los planes de Dios ser abortados por el razonamiento del ser humano. Reconozco que es más fácil decirlo que hacerlo, pero aprender a caminar sobre las aguas, no es tan sencillo como creemos.

“Y tomándolos en los brazos, poniendo las manos sobre ellos, los bendecía.”

Marcos 10. 16 RV60

Sin embargo, para todos aquellos que aferrándose a la fe y esperando el cumplimiento de las promesas divinas, son inocentes en sus razonamiento, son abrazados y fortalecidos por el mismo Jesucristo. Señor aumenta nuestra fe. Señor permítenos ser como infantes que han aprendido a esperar en tus brazos y ser consolados, bendecidos y confortados por ti.

Dios te bendiga.

UNA COMPARATIVA

Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.

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