Devocionales de Alfonso Gomez Plaza: DEVOCIONAL CRISTIANO

PERDONAR, LA MEJOR DECISIÓN

Si a la comunicación -oración- le sumamos el perdón el éxito está garantizado.

EN cualquier altercado matrimonial tenemos la opción de utilizar este hecho para bien o para acabar de destruir esa relación. Si después de comunicarse -orar- la pareja no está dispuesta a perdonar y comenzar de cero con lo que ya se tiene, sinceramente no hay posibilidades de recuperación. Se podrán evidenciar algunos años de paz, pero llegará el momento en el que la copa de la paciencia se rebosará y explotará del todo. Por ello, es necesario el dialogo constante. Pero a su vez, tenemos que aprender que la amalgama que aglutinará el amor, la paciencia y el respeto será el perdón. Esto no significa perdón y olvido como pretenden decir algunos, pues hay heridas que se causan que no son nada fácil de olvidar. Solo tenemos que aprender y comprender que tal como dice la palabra de Dios: Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.

“Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas.”

Marcos 11. 25 RV60

El perdón es una vía de tres carriles. Primera vía buscar el perdón de Dios. Segunda vía buscar el perdón de aquellos que hemos afectado y la tercera vía es aceptar el perdón de Dios y de aquel a quien ofendimos. Es fácil tomar y seguir las dos primeras vías, es decir, pedimos perdón a Dios y al ofendido, pero el perdonarnos y aceptar que los demás incluido Dios nos han perdonado, es lo difícil. De allí que lleguen las culpabilidades y las frustraciones para hundirnos en la desesperación y el caos, así definitivamente nos costará muchísimo restaurar las relaciones que se han caído.

“Porque si vosotros no perdonáis, tampoco vuestro Padre que está en los cielos os perdonará vuestras ofensas.”

Marcos 11. 26 RV60

Dios siempre está dispuestos a perdonarnos. Por algo envió a Jesucristo quien se dio en sacrificio por toda la humanidad. Dios nos dio su perdón a toda la humanidad y esto no es exclusivo para los que nos creemos sus hijos. Dios ya nos perdonó, aceptémoslo y así mismo perdonemos a los demás.

Dios te bendiga.

PERDONAR, LA MEJOR DECISIÓN