QUÉ ME DICES
La santidad está altamente ligada a la
integridad.
ES increíble descubrir que mientras Cristo nos quiere liberar de cadenas y ataduras, los seres humanos buscamos la manera para atarnos a yugos, cadenas y otras arandelas que nos anclan a las tradiciones que nada tienen que ver con Dios o por lo menos, con el diseño que él consideró para cada uno de nosotros. He podido comprobar cómo el cristianismo va mas allá de si se tienen tatuajes, si te maquillas o vistes de una manera específica. Todo esto es un mero estilo de vida y tiene que ver con las culturas que tengamos. ¿Qué podemos considerar de las iglesias samoanas donde los hombres visten con faldas? Y ¿qué consideración vamos a tener con las iglesias hawaianas nativas que sus miembros están totalmente tatuados son símbolos tribales? ¿Será que el Espíritu Santo no se manifiesta en ellos o la salvación no está al alcance de ellos?
“PUES EN VERDAD LA CIRCUNCISIÓN APROVECHA, SI GUARDAS LA LEY; PERO SI ERES TRANSGRESOR DE LA LEY, TU CIRCUNCISIÓN VIENE A SER INCIRCUNCISIÓN.”
Romanos 2. 19 RV60
El Evangelio de Cristo, lo primero que hace liberar nuestra mente. Por eso,
comenzamos a vivir un romanticismo con él, el cual nos lleva a querer demostrar
que morimos por Dios de la misma manera que Jesucristo lo hizo por cada uno de
nosotros. Es justamente en ese momento, cuando somos tan vulnerables, que nos
veremos sometidos a la religiosidad la cual nos dirá lo que deberíamos hacer, comer, vestir, vivir, hasta nos dirá
como deberíamos respirar si deseamos ser unos verdaderos cristianos. Así, la
liberación de Cristo a través de su sacrificio en la Cruz del Calvario, quedará
empañada y hasta sin valor por las propias exigencias nuestras para con los
nuevos cristianos.
“SI, PUES, EL INCIRCUNCISO GUARDARE LAS ORDENANZAS DE LA LEY, ¿NO SERÁ TENIDA SU INCIRCUNCISIÓN COMO CIRCUNCISIÓN?”
Romanos 2. 20 RV60
Hoy podemos ser libres de estas ataduras. Hoy podemos liberar a los demás
de las cadenas que les hemos impuesto. Hoy podemos demostrar que Cristo
gobierna nuestras mentes por medio de Su Espíritu Santo. La expresión: “qué me
dices”, es muy utilizada en España para apelar a la insensatez de una exigencia
humana declarando que, quién la está profiriendo no tiene ninguna autoridad
para decirlo porque sus acciones no lo avalan. Seamos íntegros, que, para ser
Santos, tendremos toda la eternidad.
QUÉ ME DICES
Si quieres que estemos orando por ti, mándanos por medio de las redes
sociales o a través de estos contactos, tu petición.
WhatsApp: Tel + 44 7446 424456
Dios te bendiga y traiga siempre trayendo revelación a tú vida de la Mente
de Cristo que ya está en ti.
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