DEVOCIONAL CRISTIANO
¿HAY INJUSTICIA EN DIOS?
En ninguna manera.
CADA vez que pretendamos igualar o equiparar la justicia humana con la justicia de Dios, haremos una grave injusticia. Nadie conoce la Mente de Dios, mucho menos, sabemos con exactitud sus conceptos para impartir el amor, la injusticia, la misericordia y la bondad que le caracteriza y hace único a nuestro Dios. Sin embargo, cuando hablamos de guerra, hambrunas, violaciones, secuestro, etc, solemos echarle la culpa a Dios; declaramos que dónde estaba Dios en esos momentos o por qué permite Dios que los niños sufran maltratos, hambres o terribles enfermedades. Y estos conceptos los tenemos simplemente porque, sinceramente no conocemos, ni entendemos el actuar de Dios. Por ello, cada vez que maldecimos a Dios, cometemos una terrible injusticia.
“COMO ESTÁ ESCRITO: A JACOB AMÉ, MAS A ESAÚ ABORRECÍ.”
Romanos 9.13
Aborrecer tiene una terrible connotación en nuestro lenguaje, pues lo aplicamos a desprecio, incluso a odio. Esto es así, porque desconocemos que en el idioma hebreo aborrecer significa: “amar un poco menos”. El Evangelio de Cristo se caracteriza precisamente por la demostración del amor de Dios por la humanidad. Por lo tanto, si tomamos literalmente este versículo, estaríamos hablando de una posible incongruencia en la esencia misma de Dios. En mi casa paterna, tenemos una hermana transexual, la amo, la respeto, trato de cuidar su corazón, porque quién sabe si mañana por la demostración de amor de Dios que vive en mí y del mio hacia ella, Jesucristo llegue a su corazón.
“¿QUÉ, PUES, DIREMOS? ¿QUE HAY INJUSTICIA EN DIOS? EN NINGUNA MANERA.”
Romanos 9.14
Jesucristo mismo dijo: Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre y madre, a su mujer e hijos, a sus hermanos y hermanas, y aun hasta su propia vida, no puede ser mi discípulo. Entonces, una vez más, ¿Dios se está contradiciendo? Será realmente como la religiosidad nos ha enseñado, ¿tendremos que despreciar a todos para ser salvos? No, y repito, no; tendremos que aprender a amar un poco menos a nuestros familiares para aferrarnos a la verdad celestial, pues, Dios desea qué nuestro testimonio de amor, demuestre a todos los seres humanos, que él es real y que murió en la Cruz del Calvario por toda la humanidad.
Dios te bendiga.
¿HAY INJUSTICIA EN DIOS?
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Dios te bendiga y traiga siempre trayendo revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.
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