DEVOCIONAL CRISTIANO - DEBEMOS CONFIRMARLO

 DEVOCIONAL CRISTIANO

DEBEMOS CONFIRMARLO

Si nos vamos a desviar, esperemos la confirmación.

    LO que mas desespera es la propia espera. Somos por naturaleza, seres impacientes. A pesar de ello, el Libro de Proverbios nos habla constantemente sobre la necesidad de ser pacientes y perseverantes. Por ejemplo: El que es paciente muestra gran discernimiento; el que es agresivo muestra mucha insensatez. Soy muy consciente que, este mensaje primero lo estoy escribiendo para mi, porque suelo ser muy impaciente y en muchas ocasiones, no he esperado la confirmación por parte de Dios en una pregunta hecha a él. Por lo tanto, me he embarcado en emprendimientos que, evidentemente, Dios no tiene porque respaldarme. Esta misma mañana le decía en oración a Dios: “Papi, cómo me gustaría tenerte cara a cara y esperar escuchar tu voz audible para lo que te estoy pidiendo; sin embargo, sé que no lo harás. Dame por favor, paciencia y la habilidad espiritual de tener mis ojos abiertos para ver tu respuesta por medio de todo aquello que me mandas cómo señales”. 

“PUES LES PARECIÓ BUENO, Y SON DEUDORES A ELLOS; PORQUE SI LOS GENTILES HAN SIDO HECHOS PARTICIPANTES DE SUS BIENES ESPIRITUALES, DEBEN TAMBIÉN ELLOS MINISTRARLES DE LOS MATERIALES.”

Romanos 15.27

Oremos juntos: Dios mío, igual que Jesús de Nazaret enseñó a los discípulos, te ruego que me enseñes a tener paciencia y perseverancia para saber esperar tu tiempo, porque tu eres perfecto y sabes todo lo que es bueno para mi vida. 

El dinero recaudado por aquellos que estaban fuera de la entre comillas gracia hebrea, estaban dispuestos a ayudar a los necesitados judíos. Y desde luego, alguien debía llevarles el dinero. En aquel tiempo, no existían empresas especializadas de envío de dinero, ellos se apersonaban en la entrega. Desde luego, el Apóstol quién tenía que ir a Jerusalén, aprovecharía el momento. Algo similar está en nuestras manos. Es decir, si somos conscientes que en esta vida y en este Planeta, solo somos peregrinos y que estamos de paso, comprenderemos que debemos cumplir la misión y debemos esperar la confirmación por parte de Dios. Así, haremos la labor encomendada por el propio Jesucristo: Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén

 

“ASÍ QUE, CUANDO HAYA CONCLUIDO ESTO, Y LES HAYA ENTREGADO ESTE FRUTO, PASARÉ ENTRE VOSOTROS RUMBO A ESPAÑA.”

Romanos 15.28

Oremos juntos: Padre Celestial, ahora que soy consciente que he de enseñar acerca del Reino de los Cielos, dame el querer como el hacer y cumplir con tu mandato. De la misma manera, confírmame con quién estás trabajando para hacer tu Santa y perfecta voluntad. 

Otro punto clave que me gustaría comentar es, la importancia de un tema bíblico que encontramos dos o tres veces. Normalmente, significa la confirmación de un acto por parte de Dios y demuestra su deseo que lo hagamos. En este caso, es la segunda vez que el Apóstol asegura a la Iglesia de Roma que cuando este en camino para España, pasará a visitarlos. ¿Lo cumplió o no? Realmente para nuestra salvación no es un tema relevante. El hecho es que, dentro de la voluntad apostólica la labor misionera estuvo siempre presente y que él, estoy casi seguro que, estuvo esperando la confirmación por parte de Dios, sobre su visita a España y a Roma. A esta última ciudad sí que lo hizo, porque aparentemente, allí fue donde él murió. 

Dios te bendiga. Recuerda de compartir este texto a todas las personas que más puedas.

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Dios te bendiga y traiga siempre trayendo revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.