DEVOCIONAL CRISTIANO
MUCHA GRATITUD
Es fácil siempre pedir, lo difícil es agradecer.
EL apóstol Pablo dijo: Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, juzgaba como niño; mas cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño. Ahora vemos por espejo, oscuramente; mas entonces veremos cara a cara. Ahora conozco en parte; pero entonces conoceré como fui conocido. Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor. Poco a poco, tendremos que ir creciendo y madurando conforme permitimos que la fe, la esperanza y el amor de Dios, se hagan una verdad en cada uno de nosotros. Y la oración que hacemos a Dios diariamente, nos ayuda a reflejar esa madurez; cuando yo era un jovencito y deseaba buscar a Dios, lo hacía pidiendo ayuda solamente. Ayuda al tener que enfrentar una difícil situación en la que yo mismo me había metido. Cuando fui una persona adulta, comencé a buscar a Dios para que me guiara antes de tomar decisiones. De esta manera, buscaría hacer su voluntad. Ahora que rozo los 50, y considero que mi relación con Dios, debe pasar por estar eternamente agradecido justamente por el amor, esperanza y la fe que me ayudan a ser, una persona imperfecta, tratando de agradar a un Dios perfecto.
“SALUDEN A ANDRÓNICO Y A JUNÍAS, MIS PARIENTES Y COMPAÑEROS DE CÁRCEL, DESTACADOS ENTRE LOS APÓSTOLES Y CONVERTIDOS A CRISTO ANTES QUE YO.”
Romanos 16.7
Oremos juntos:¡Oh mi Dios! Tú eres grande, poderoso y majestuoso. Tú eres el Creador y el dueño de todo lo que existe. Tu Reino y poderío no tiene fin y, lo mas increíble es, que tu amor me alcanzó y me sanó. Gracias Dios de gloria y majestad.
Reconocer y dar gracias por las personas que nos han hecho bien, es otra manera de demostrar nuestra madurez en la oración. Esto es un ejemplo buenísimo que recibimos por parte del Apóstol. Él siempre supo tener presente en sus cartas la gratitud hacía quienes le servían. ¿Hace cuánto tiempo que no agradecemos a papá y mamá por todo lo que han hecho por nosotros? ¿Hace cuánto tiempo no agradecemos por nuestro trabajo y cómo Dios nos sustenta por medio de ello? ¿Hace cuánto no agradecemos por la vida que tenemos a Dios, porque a pesar de todas las circunstancias que estemos viviendo, estamos con él? En fin, son muchos los motivos para tener justamente, mucha gratitud.
“SALUDEN A AMPLIAS, MI QUERIDO HERMANO EN EL SEÑOR.”
Romanos 16.8
Oremos juntos: Padre Celestial, son ángeles que envías alrededor de mí la multitud de amigos que me han protegido. Mil gracias por cada uno de ellos. Mil gracias por tanto amor recibido. Mil gracias por la esperanza que tengo en ti, pero sobre todo, por el amor que tienes desde la eternidad por mí. Te lo digo en el Nombre de tu precioso Hijo Jesucristo. Amén.
Hoy es un buen día para tener mucha gratitud a Dios por todo lo que nos ha dado. Hoy es un buen día para que dejemos de estar pidiendo a Dios como niños recién paridos y simplemente agradezcamos por todos los favores recibidos. Hoy es un buen día para hacer realidad el Salmo que dice: Confía en Dios y haz el bien. Habita en la tierra y apaciéntate de la fidelidad. Deléitate enDios y él te concederá los anhelos de tu corazón. Encomienda a Dios tu camino; confía en él, y él hará.
Dios te bendiga. Recuerda de compartir este texto a todas las personas que más puedas.
MUCHA GRATITUD
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Dios te bendiga y traiga siempre trayendo revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.
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