DEVOCIONAL CRISTIANO -UN GRAN ESFUERZO

 DEVOCIONAL CRISTIANO

UN GRAN ESFUERZO

Ni si quiera el sol sabe cuál es su verdadero poder.

    DICE  la palabra de Dios: del fruto de la boca del hombre se llenará su vientre; se saciará del producto de sus labios. La muerte y la vida están en poder de la lengua, y el que la ama comerá de sus frutos. Si, la palabra es creadora. La palabra en sí misma tiene mucho poder. Dios habló en el Génesis y toda la creación se pudo en acción y todas las cosas se hicieron. También, podemos comprobarlo es la personas que tienen un estilo de vida un poco excéntricas, llenas de amargura, resentimientos y dolor. Estas personas, se pasan todo el día maldiciendo y derramando amargura por donde caminan. Así todo lo que ellos dicen, arrastran con esas maldiciones hacía los demás. Sea que hagamos cosas para bien, siendo conscientes de ello, o cosas para mal, siendo inconscientes de ello, todo lo que hacemos, genera un gran esfuerzo. Y todo ese esfuerzo, tendrá su reconocimiento.  

“SALUDEN A HERODIÓN, MI PARIENTE. SALUDEN A LOS DE LA FAMILIA DE NARCISO, FIELES EN EL SEÑOR.”

Romanos 16.10

Oremos juntos: amado Dios, tú ya nos has reconocido y eso, no tiene precio. Nos has nombrado hijos tuyos en pleno derecho por el gran esfuerzo de Jesús de Nazaret en la Cruz del Calvario. Por eso, te alabo y exalto Dios. 

El Apóstol Pablo, en el último capítulo de su Evangelio, está trayendo a honra a una serie de personas que fueron cruciales para su ministerio. Él los recuerda con mucho amor, por lo tanto, los honra haciendo que sus nombres y acciones, sean recordadas más de 2000 años después. Su gran esfuerzo en la fe, con su fidelidad, dedicación, entrega, servicio, etc. tiene un alto valor para Dios porque con ello, el Reino de los Cielos fue extendido por el Apóstol. De la misma manera, cada uno de nuestros esfuerzos para llevar el Evangelio de Cristo al resto de la humanidad, será recompensada por Dios mismo y él nos dará el fruto de todo nuestro esfuerzo. 

 

“SALUDEN A TRIFENA Y A TRIFOSA, LAS CUALES SE ESFUERZAN TRABAJANDO POR EL SEÑOR. SALUDEN A MI QUERIDA HERMANA PÉRSIDA, QUE HA TRABAJADO MUCHÍSIMO EN EL SEÑOR.”

Romanos 16.11

Oremos juntos: bendito Dios, nada de lo que hago por llevar el bien a los demás sé que cae en saco roto, pues tú, eres galardonador de quienes te buscan y hacen tu santa y perfecta voluntad. Por ello, Dios sigue utilizándome para llevar tu palabra a toda la humanidad.

Quizá, mi vida se acabe mañana. Sin embargo sé que todo lo qué hice, Dios me recompensará por mi esfuerzo. Si Dios considera hacerme un reconocimiento en vida, pues bien. Más, si así no fuera, sé perfectamente qué, en la eternidad estaré todos los días con él y ese, será el mayor pago y reconocimiento que Dios pueda hacerme. Consideremos pues, que nuestra entrega a la extensión del Reino de Cristo, es un gran esfuerzo, aunque solo hablemos del poder de Dios y ese esfuerzo, será reconocido tanto en los cielos, como en la tierra, como en toda la eternidad.

Dios te bendiga. Recuerda de compartir este texto a todas las personas que más puedas.

UN GRAN ESFUERZO

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Dios te bendiga y traiga siempre trayendo revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.