DEVOCIONAL CRISTIANO - CON CERTEZA

 DEVOCIONAL CRISTIANO

CON CERTEZA

Solo podemos estar seguros con Dios.

    NO tener seguridad de las cosas nos debilita profundamente. Por ejemplo, al momento de considerar el título para este mensaje no estaba seguro sobre el. Pues, consideré entre dos opciones: la primera Con Certeza y la segunda fue, ¿qué debemos hacer? Justo en ese momento de incertidumbre, aunque este ejemplo es muy superfluo aparentemente, busque de la guía del Espíritu Santo para decidir sobre cuál era el tema que él deseaba que tratara y cuál sería el título que debía ponerle. Por lo tanto, logré sentir (en mi mente) que debía tratar el tema de la certeza en nuestras vidas. Por lo tanto, tendría que enfocar el mensaje a comprender que solo tenemos seguridad sobre lo que hemos vivido y qué, si no era el caso, (haberlo vivido) el Espíritu Santo de Dios, es quién nos dará la confianza, seguridad o certeza, para tomar la autoridad que necesitamos y así, estar seguros de lo que estamos diciendo y haciendo. Porque al fin y al cabo, somos testigos y damos testimonio de un Dios vivo que habita en nosotros por medio de la Mente de Cristo (el Espíritu Santo guiándonos) que ya está en nosotros.

   

“SEPA TODO EL PUEBLO DE ISRAEL, CON TODA SEGURIDAD, QUE A ESTE MISMO JESÚS A QUIEN USTEDES CRUCIFICARON, DIOS LO HA HECHO SEÑOR Y MESÍAS.” 

Hechos 2.36

Oremos juntos: Abba Padre, sé que puedo acércame a tu trono de gracia confiadamente y adorarte. Porque he sido justificado por Jesucristo. Padre Celestial, sigue ayudándome a mantenerme en una íntima y estrecha relación contigo, te lo pido en el Nombre de Jesucristo.

Ninguno de nosotros, hablo de los cristianos actuales, estuvimos físicamente en el momento de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Sin embargo, toda nuestra fe y seguridad viene de la certeza de creer que los hechos narrados en el Nuevo Testamento, acerca de la vida y obra de Jesús de Nazaret, fueron reales. Otra cosa es, humanamente no podemos explicar muchos de los milagros allí acontecidos como el por qué de tanto sufrimiento y cómo fue qué Jesús de Nazaret resucitó. Solo nos queda la certeza de convencimiento por parte del Espíritu Santo que él sí vivió, todo lo que hasta ahora nos han contado.

 

“CUANDO LOS ALLÍ REUNIDOS OYERON ESTO, SE AFLIGIERON PROFUNDAMENTE, Y PREGUNTARON A PEDRO Y A LOS OTROS APÓSTOLES: HERMANOS, ¿QUÉ DEBEMOS HACER?.” 

Hechos 2.37

Oremos juntos: Amado Dios, estoy confiado, estoy firme, estoy esperando pero en ti. Por ello, tengo la certeza qué todo lo escrito en el Nuevo Testamento sobre Jesucristo fue real. Gracias, porque no lo viví pero sí estoy convencido por ti que estaré en la eternidad contigo por lo que ocurrió en la Cruz del Calvario a través de tu Hijo Jesús de Nazaret. 

Justo en este párrafo conviene poner la pregunta: ¿qué debemos hacer? Vamos a permitir que los miedos, dudas e inseguridades nos debiliten. O todo lo contrario, vamos a comenzar a vivir con la certeza que Dios, a través de la herencia que recibimos de Jesucristo es decir, Su Espíritu Santo guiándonos, cambiemos nuestro estilo de vida y nos apropiaremos de todas las verdades que tiene Dios para cada uno de nosotros. Es decir, confirmar que somos esos pequeños cristos que estamos llamados a ser.

Dios te bendiga. Recuerda de compartir este texto a todas las personas que más puedas.

CON CERTEZA

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Dios te bendiga y traiga siempre trayendo revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti.